miércoles, 20 de mayo de 2009

DENTRO DE MI




Todo comenzó por las frías semanas de febrero. Había algo que desde hacía días me tenía de una manera extraña. Algo se revoloteaba en mi interior, y yo a pesar de darme cuenta, no sabía que pasaba. Un extraño instinto me obligó a sentir un deseo de autoprotección.


Días después, me dí cuenta que era eso extraño que me hacía tener curiosos altibajos de ánimo.

Al principio no lo podía creer, veía una y otra vez la prueba de que era verdad y aún así dudaba.

Con el tiempo me fui convenciendo poco a poco de la realidad. Pero el miedo siguió morando en mí. A veces tenue como la brisa, otras veces tan devastador como un huracán.

Hoy han pasado los meses, me siento mas tranquila... aún tengo miedo. Pero sigo sintendo la misma felicidad que plasmé en esa pequeña carta para mi hijo, el día que supe estaba creciendo dentro de mi.


miércoles, 26 de noviembre de 2008

TEMPRANO



Caminaba como todos los sábados por la mañana, con la misma flojera que dá el levantarse a trabajar cuando una gran parte de la ciudad duerme.


Bajo el suave viento que anunciaba la inminente llegada del invierno, tomé mi bufanda y la enredé un poco más en mi cuello; el frío aunque suave llegaba a calarme hasta lo más hondo.


Miré hacia el otro lado de la calle y la distinguí. Ahí estaba ella, como cada sábado por la mañana, era difícil saber si apenas iba o ya había regresado. Por su apariencia pude deducir que regresaba.


Se acercaba sin descaro alguno a la ventanilla de un coche y me dí cuenta que apenas hacía un par de minutos había bajado de él.
Con una rosa un poco marchita y mal envuelta en un papel transparente sonreía traviesamente al conductor. Le agradecía el buen rato vivido y la triste flor que llevaba en la mano.


No pude ver más que la efímera felicidad que reflejaba su rostro. Tal parecía que la miseria, soledad y nostalgia que se pudiera pensar que tenía se había ido con el hélido suspiro del cielo.


Por mi parte, me alegré por ella; al menos comenzaba bien sú día.


Al poco tiempo llegó el autobús que yo esperaba y tuve que apearme sin descubrir el desenlace de tan entretenido juego amoroso, sin embargo pude adivinarlo, él se iría contento por haber tenido lo que buscaba, ella, tal vez al fin, había encontrado también un poco de lo que tanto tiempo había soñado.

sábado, 13 de septiembre de 2008

ESCAPE



Sentí un pequeño cardo encajarse en mi pie, hasta ese momento me dí cuenta de que estaba descalza y semi desnuda.


Las lágrimas se congelaban con el frío de la noche y ni siquiera lograban rodar por mi cara.
Solo caminaba, tropezando con las raíces enmedio de la oscuridad.


Aún sentía tu calidez en mi cuerpo, por eso no me congelaba. Pero eso me estremecía, no quería sentirte, no quería recordarte. Me había prometido a mi misma, a ti, en esta noche alejarme para siempre de tu lado.


Lo siento tuve que adormilarte para poder escaparme de tí. El vino que sabrosamente degustaste fue tu veneno. Te mato, te mato con mi ausencia, con mi adiós. Te clavo después de tanto tiempo aquel mismo puñal que clavaste en mi corazón. Y que luego, después de tanto intentarlo frustradamente, logré sacar... tardaron en sanar mis heridas, mi carne herida y mi alma agujerada se resistían a dejar ese puñal, ya podría decir que era parte de ellas. Pero no mía, eso hizo que esas heridas sanaran y que el daño ni siquiera se notara ya. Me siento fuerte, valiente. Ya no regresaré, mi alma revivió y es hora que le de otra oportunidad. Te la doy también a tí, eres libre, puedes sanar igual que yo tus heridas.


Cuando despiertes estaré lejos, cruzaré mares, valles y ríos; y tu llorarás como yo lloré tanto tiempo, verás la sangre correr por tu herida.


Mi alma volará con el viento, las flores serán mis naves y los mares mis mantas. No necesito nadamás, me tengo a mi, conmigo es suficiente.

domingo, 13 de julio de 2008

LAS ESTRELLAS


Es de noche. Postergo mi ida a dormir a pesar de que quiero estar a tu lado.
El cansancio me agobia, tanto que ni la cama me promete un buen descanso. Quiero dormir, quizá bajo el agua, donde solo escuche el ir y venir del viento meciendo suavemente el interminable mar que me cubre.
Quisiera salir, caminar bajo las estrellas en el silencio de la noche de domingo, donde todo el mundo mas que por gusto por obligación va a la cama temprano, con la dulce melancolía que trae consigo el ir a trabajar, a la escuela o a las labores domésticas que conlleva el que sea lunes por la mañana.

No me queda de otra, tomo un vaso con agua fría, lo paso por mi frente, cierro los ojos, y pienso en tí, pienso en lo refrescante que como siempre, harás mi noche... no importa si mañana tenga que levantarme temprano, no importa que las estrellas no sean mi techo cuando esté en la cama... lo que importa es que tendré a una brillante junto a mi... es hora, ya no quiero retrasar mas mi ida a la cama... quiero estar a tu lado.
Me asomo al patio y doy un vistazo al cielo... ahí están las estrellas, les digo buenas noches, entro a la casa, cierro la puerta y apago la luz.

sábado, 14 de junio de 2008

SUEÑO


Ayer tuve un sueño, un sueño terrible. Soñé que no estabas junto a mi, que despertaba y todo lo vivido en éstos últimos años había sido solo una quimera.

Te busqué a mi lado y no estabas, el terror se apoderó de mi y corrí hacia el baño; tampoco te encontré. Presa del miedo bajé descalza las escaleras, corrí hacia la calle y no vi tu coche. Confundida regresé a mi cama. Pensé y pensé una vez más que había podido suceder. Me decía a mi misma que todo había sido un sueño. Busqué tu ropa en el clóset, olí las sábanas buscando tu aroma... no percibía nada, solo un miedo terrible me nublaba todos los sentidos. Lloré, me cobijé bajo las sábanas como queriendo escapar, como un niño se oculta de la oscuridad de su habitación. No se como volví a dormirme.
En mis sueños me veía caminando por las calles, sola, sin más compañía que un sentimiento dentro de mi ser, caminaba buscándote, de pronto comenzó a llover, no traía como cubrirme de la lluvia y sin saber como, aparecí en aquella calle en la que juntos nos habíamos mojado en una lluvia anterior, giré mi rostro y te ví ofreciéndome un cuaderno para taparme la lluvia de la cara. Sonreí. De pronto un estremecimiento me hizo despertar. Desperté de un salto y te ví durmiendo a mi lado. Sereno, como siempre, con una pequeña sonrisa en tus labios. Me acerqué y te besé.


martes, 15 de abril de 2008

REVOLUCION


Siento el pólen del maíz llegar hasta el fondo de mis pulmones. Tengo unas ganas incontrolables de estornudar, mi prima, aqui a mi lado me ha tapado la boca para que no haga ningún ruido.
Siento su mano temblorosa cubrir la mitad de mi rostro.
No sé porqué nos mandaron a esconder aquí, será porque los demás escondites son los primeros que revisan los bandoleros..."los revolucionarios" los que defienden la causa "justa" para los campesinos... no son mas que hombres llenos de deseo, hambre y cansancio, que solo hacen huír a la gente y esconder sus pocos tesoros.
¿Yo un tesoro? Mi honra es mas que eso, sin ella, dicen que no soy nada, por eso me metieron aqui, en esta troje llena de polvo, ratones y no se si una que otra víbora.
Pero tienen razón, es mejor aguantar este encierro a sufrir bajo las manos de esos desdichados.
Escucho ruidos de caballos...gritos...disparos... gallinas y vacas gritando... solo me queda rezar...rezar y esperar que todo pase... que salga cuando el silencio de la noche se haya abierto camino entre la gritería del día.
Solo espero, y rezo, para que lo que tenía, mi alma, permanezca en su sitio.

viernes, 7 de marzo de 2008

MI NOMBRE NO IMPORTA...

… al fin de cuentas sabes quien soy.

Recuerdo aquella la primera noche en que me le acerqué, tenía miedo, pero a la vez estaba deseosa de hacerlo. Lo había soñado tantas veces, que creo que mi miedo, mas que por hacerlo era por no decepcionarme.
Decidí probarlo, se había convertido en una obsesión, o más bien en un deseo insatisfecho.
No lo lamentaría nunca, fue como cuando un niño descubre por primera vez lo delicioso que es un dulce, cuando por fin, después de tanto observarlo de lejos, se anima a probar aquello tan agradable que los demás disfrutan tanto.

No me decepcioné, al contrario, mi hambre se convirtió en voracidad, en una desnutrición constante llena de deseo, voluptuosidad y necesidad.

La fui saciando poco a poco, no necesitaba más, eso dentro de lo que cabe me era suficiente para subsistir, pero a la vez era como una droga que hace depender de ello para todo. No quería nada más, no quería amor, no quería lágrimas, ni gritos ni aplausos, lo único que quería era seguir sintiendo ese placer, eso es lo único que me importó y me ha importado desde entonces.

No soy como las demás, no estoy aquí porque mi interior esté tan roto que necesito que alguien lo una temporalmente con cinta adhesiva, no, tampoco estoy porque necesito tanto lo que me pagan por ello que no me importa rasgar mi alma una y otra vez; no, ni mi interior está roto, ni mi alma se rasga una y otra vez; al contrario, me siento plena, me llena de satisfacción todo, cada palpo, cada caricia, cada grito y cada ser que poseo.

Estoy aquí para llevar mi vida como cualquier otra persona, como un doctor sana a los enfermos, como un religioso salva las almas, como una madre da la vida por sus hijos; así estoy aquí yo, dispuesta a dar todo por satisfacer y satisfacerme a mi misma, por saciarme con cada grito como si fuera un soldado recibiendo una medalla.

Estoy feliz, desde que estoy haciendo lo mío, ya no me falta nada, mi hambre se sacia cuando lo deseo y mi deseo se sacia con mi hambre. Simplemente eso, nada mas. Solo soy tan feliz como siempre lo había soñado.

¿Y mi nombre?, te lo he dicho, no importa, podría decir Elena, Marie o Yang, en esto los nombres solo son sombras, al final de cuentas, como en todo, siempre habrá otra con mi nombre en algún lugar del mundo.